Pues esta semana yo no ví acción en el Baja. Tuve que encerrarme un rato a cuidar mis molares extraídos. Así que el Beto Beat tendrá que escribir la reseña semanal, si es que sus múltiples ocupaciones le dejan un hueco. El día en el que por fín pude salir a distraerme un rato , fue el sábado. Visité a mis cuates en el Baja Street, quiero agradecer al Salvador su disposición a suplir aquí al quejoso-marica, se rifa el muchachón. Estuve aquí durante el primer primer turno del Circo y estaba coqueteando con la idea de ir a ver a "Ed" al Hotel Virreyes (banda donde toca Javierón). Decidí, por fín, ir porque sólo era un rato y tal vez no tendría otra oportunidad de escucharlos en vivo (ya me había perdido el toquín del Pasaguero y del Factory), llegué con Cinthia al lugar que está en la esquina de Izazaga y eje central. Dejamos el carro en un parking medio tenebroso y caminamos por frente de unos congales de Eje central, uno de ellos reconocible en la portada de Panteón Rocococó donde la entrada es un tigre blanco, sólo sentía como Tomato girl caminaba un poco nerviosa y las miradas chacas se dirigían hacia ella. Al arribar al lugar nos encontramos con Don Genarione, Gerardo y unos amigos de la Fac. de Cinth. Ella se quedó por ahí y yo me dediqué a explorar el lugar. El foro es el vestíbulo-lobby del hotel que ahora, me parece, funciona como hostal. Unas columnas forradas con sillón alrededor de ellas, los techos iluminados con tenuidad carmesí, unos cushions donde podías echar la hueva o un rico fajecín (si aplicaba). Existía otro salón que funcionaba como cuarto de barra, se me figuró un poco a los salones del Fixión; pero este contaba con dos antiguos ventaneles que te dejaban ver la iglesia que está en el camellón de Izazaga. La gente joven y Kool!; la música, poca madre, me sentía halagado de escuchar desfile de música tan chida desde Yeah, yeah, yeahs, Kaiser Chiefs o los Killers, hasta Placebo o Pixies. Me compré una botella de agua, que me costó lo mismo que una chela, 20 varos ¡¡¡¡¡¡"·$·@#~€¬!!!!!. Después me encontré al Harto(poco)pisto del coto quién llegó con Alan y Cia. Ed tomó el escenario, nos encontramos con Tomato girl. Escuchamos su set. David en la guitarra= Reminiscencias psicodélicas con acordes abiertos simples; pero bien ejectutados, el sonido fresco, un poco aturdido a veces; pero con una idea nueva y buena; Javier en el bajo= parecía que andaba en la onda the cure, usando síncopas entre figuras y haciendo unos coros octava arriba muy buenos y Cristina quién, para mí, es la que musicalmente está más pesada en la banda, una mezcla de glamour y punch a la hora de rematar, redobles firmes y remates precisos, bailaba con los hi-hats todo el tiempo, base sabrosa para ejecutar cualquier ritmo bailable. En conjunto Ed está interesante, utilizan inserts como una entrevista a Frank Zappa o un poema de Baudelaire de las "Flores del mal" musicalizándolos y jugando con la sonoridad fonética de la secuencia vocal vs. el sonido Ed. En mi opinión en las canciones donde ellos cantan deben ser mas imaginativos con las armonías y mover la garganta en todas direcciones, es decir buscar distintos rangos vocales que jueguen con la música. Over all me gustó la propuesta, tal vez sólo pulir más el sonido y afinar el estilo que se va desarrollando muy bien. Al finalizar un guerito con facha de extranjero empezó a mezclar, aunque me estaba gustando lo que escuchaba, ya mis encías se quejaban del bajeo en ellas y me fui tempranito a dormir. Me despedí de Ed, de Tomato girl, Mirsha, Genaro, Gerardo y demás y partí hacia el carro, rechazando las propagandas y cortesías para ver peluche en el centro de la ciudá. Vaya que me sirvió salir aunque fuera un ratín...Sigan al Ed porque ai va para arriba. Ya nos veremos otra vez en el Baja la siguiente semana.

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